Es coherente tratar la manera de afrontar esos estados , la capacidad de adaptarse, de superarlos, o de ver el lado positivo de los cambios desfavorables. Esta faceta es la resiliencia.
La resiliencia se ha definido como la habilidad de desarrollar una adpatación con éxito de un individuo expuesto a factores biológicos de riesgo o a circunstancias de la vida estresantes o dolorosas emocionalmente.
Es posible determinar como diferentes áreas cerebrales están relacionadas con circuitos neuronales que conforman las bases de la memoria y la vigilia los cuales se reactivan automáticamente para sustentar los recuerdos . para esto intervienen la neocorteza cerebral y a nivel subcortical, la amigdala y el hipocampo.
Desde el punto de vista neuroquímico participan en la resiliencia sustancias hormonales y neurotransmisoras del eje cerebro-hipotálamo-suprarenal-gonodal:
-El cortisol en concentraciones elevadas atenta contra el comportamiento risiliente.(neurotransmisor adrenergico)
-El bajo nivel de testosterona ( hormona9 en situaciones adversas disminuye la proactividad y autoconfianza y la asertividad provocando predominio depresivo.
-La di-hidro-epi-androsterona DHEAes pro reisiliente de forma directa e indirecta. Contraresta los efectos del cortisol. Los individuos con pobre respuesta de este neurotransmisor colinérgico están mas expuestos a estados depresivos y trastornos de ansiedad; los altos niveles de DHEA previenen los trastornos por estrés postraumático.
-Al principio hay incertidumbre aprensión, un grado de vulnerabilidad y tensión que va en aumento.
-En un segundo momento llega el miedo, la confusión y la desorganización emocional.
-El tercer periodo llamado proscrito o crónico, le estres el temor ,la ofuscación, la labilidad y crisis emocionales diversas son constantes.
-Después la fase de recuperación en la que pueden surgir estados depresivos o cambios emocionales duraderos. En esta fase hay multitud de manifestaciones entre las que cuentan las adapatativas o de acomodamiento.
La resiliencia es proceso de adaptación a la adversidad, al trauma, la tragedia, las amenazas u otras fuentes significativas de estres. los sujetos pro-relientes son capaces de sobreponerse y de superar los momentos de dolor emocional , e incluso de salir fortalecidos de lo negativo
El bajo nivel de resiliencia es el que conduce a los estados depresivos con tendencia a padecer pensamientos compulsivos, como son los intensos episodios de reactivación de la memoria en el momento estresante.
Es importante la ayuda para readaptar el funcionamiento individual y colectivo activando la resiliencia en lo posible, o ayudar a adquirirla cuando es inexistente. La ayuda consiste en
-Analizar acciones de defensa y protección
-Búsqueda de equilibrio que enfrenta a la tensión
-Compromiso y arrastre del desafío
-La superación
-La actitud positiva del sujeto
-la toma de responsabilidad y de creatividad
- No hay obstáculos insuperables pensar que en el futuro las cosas mejorarán; no dar mayor proporción a los problemas de los que tienen.
- El Cambio es parte de la vida. Es posible que cambios desfavorables impidan alcanzar ciertos objetivos. Aceptar las circunstancias que no puedan cambiar y plantarse nuevas metas.
- Metas realistas basadas en cosas que se puedan lograr y marcarse una dirección posible.
- Afrontar los problemas. Ante situaciones adversas es mejor asumirlas que ignorar los problemas y las tensiones o esperar que desaparezcan.
- Confiar en si mismo. cultivar una visión positiva de uno mismo, desarrollar la confianza en la propia capacidad resolutiva.
Explorar actividades que puedan ayudar a desarrollar reisilencia
Fuente: Educar para el Desarrollo Humano
Autor: Dr Luis M.Labath. Médico especialista en Medicina Interna. Miembro de honor de la Asociación Médica Argentina.
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