Grafoterapia y Violencia

“Si la escritura es el reflejo de la actividad de nuestro cerebro y éste es fuente creadora y reguladora de las percepciones, impresiones, instintos, tendencias, sentimientos y reacciones del ser humano, deduciremos fácilmente que, a través de la grafía manuscrita, se puede conocer el carácter de la persona.
Si además admitimos que la energía psicomotriz avanza desde el cerebro hasta la mano imponiéndole unos movimientos gráficos determinados, podremos también aceptar el efecto contrario, es decir que, por la ley de la reversibilidad  (que avala el hecho de que el circuito cerebro-gesto gráfico tiene dos direcciones) admitiremos igualmente que el acto de rectificar factores gráficos provoca también modificaciones en las parcelas del carácter que los representan” (Isabel Sánchez-Bernuy, Grafoterapia y grafoestima, Instituto de Orientación Psicológica EOS, Madrid, 2009). 

Como se ha expuesto, la Grafoterapia o reeducación gráfica,  es la reeducación del gesto gráfico bajo el triple punto de vista motor, psíquico y metal, mediante cuya técnica se puede tratar la personalidad.

 El gesto gráfico al repetirse de manera habitual y metódica influye sobre el psiquismo de quien lo realiza. Las conductas negativas son la consecuencia de un hábito negativo, repetido y constante. Con la reeducación gráfica se sustituyen hábitos nocivos por otros positivos.

La Grafoterapia se puede utilizar  para corregir aspectos, como por ejemplo: 

  . Estados de angustia                                                            

 . Ansiedad

 . depresión

 . baja autoestima

 . timidez, problemas de comunicación

 . falta de voluntad y de iniciativa

 . falta de firmeza y decisión

 . falta de concentración y atención

 .  agresividad
 .  miedos, temores. Entre otros

Las sesiones de grafoterapia comienzan con una muestra de la escritura inicial de la persona. Con esta muestra se realiza el perfil de la personalidad y se van ofreciendo distintas pautas que el paciente va aplicando. Cada proceso es particular dependiendo de las necesidades de cada persona, pero existen ciertas pautas “generales” que suelen coincidir con los módulos establecidos.

El objetivo no es cambiar la letra, sino que es un conjunto de reeducación de algunos movimientos a la hora de escribir y corregir ciertas posturas corporales de la espalda, brazo, mano, que impiden realizar una escritura adecuada.

 Para tratar la violencia  y el descontrol, una vez analizadas las causas , el grafólogo analizaría la letra, que encontraría con signos de tensión, y agresividad,

•  Escritura lanzada ,acerada, en maza, en ángulos  acusados, invasión de zonas, cúmulos de presión
•  Rasgos de inmadurez ,involucionada,infantil 
•  Inseguridad, irregularidades. 

 Para estos rasgos de escritura hay ejercicios gráficos que repercuten en suavizarlos mejorando conductas, ya que  según la ley de la reversivilidad citada, se reconoce que rectificar factores gráficos contribuye a la modificación de los factores de carácter que representan.

J. Motis P